¿Electrocardiograma o Ecocardiograma?
Ahora que llega el buen tiempo y proliferan las carreras, muchos deportistas desean hacerse un chequeo deportivo para saber en qué estado de forma se encuentran.
Ya os hablamos anteriormente de la prueba de esfuerzo, con la que conseguimos información de gran utilidad para una correcta gestión de carga de entrenamientos. Pero aunque menos frecuentes esa prueba de esfuerzo debemos complementarla con otros estudios, en este caso del motor que mueve nuestras piernas, el corazón, por lo que muchos deportistas se preguntan:
¿Qué prueba médica me conviene realizar? ¿Electrocardiograma o Ecocardiograma? ¿Qué diferencias hay y para qué sirve cada cosa?
¿Qué es el electrocardiograma?
Es una prueba sencilla e indolora, exceptuando el hecho de tener que pegar los electrodos, que como mucho puede resultar algo incómodo. Además, no te tomará mucho tiempo realizarla.
Actualmente muchas federaciones deportivas la exigen a sus deportistas ya que aporta datos de relevancia en cuanto a posibles afecciones cardiacas. El electrocardiograma recoge la actividad eléctrica del corazón, es decir, el impulso que hace que este se contraiga y bombee la sangre de forma efectiva. Mediante unos electrodos colocados en lugares estratégicos se miden los impulsos del corazón desde diferentes ángulos. 
¿Qué información nos da el electrocardiograma?
El electrocardiograma presenta unos trazos particulares en el caso de cada deportista, las variaciones que pueden llegar a mostrar indican al médico si se encuentra ante un problema cardíaco. Entre los parámetros que el electrocardiograma revela durante la prueba encontramos el ritmo y la regularidad, pudiendo revelar trastornos actuales e incluso anteriores al día de la prueba.
Entre las patologías que permite localizar encontramos bloqueos de aurículas, arritmias o incluso infartos previos no diagnosticados, por lo que su realización antes de cualquier prueba deportiva es una gran medida de prevención.
[tuit]Para saber el estado real de nuestro corazón no podemos excluir ninguna prueba, Ecocardiograma, Electrocardiograma y prueba de esfuerzo son imprescindibles. #SaludParaDeportistas #BlogUrbanRunning[/tuit]
El ecocardiograma.
Si el electrocardiograma es una prueba indolora, el ecocardiograma puede ser incluso agradable, el proceso se realiza mediante un Ecógrafo, que usando ultrasonidos es capaz de revelar nuestro interior al detalle. Tumbados en posición lateral el Ecógrafo toma imágenes en tiempo real, pudiendo incluso grabar el proceso y el movimiento de nuestro corazón.
Dependiendo del tipo de ecógrafo que se utilice se consiguen imágenes, en 2D, 3D o incluso con contrastes en los cuales ver el flujo de sangre en corazón y arterias.
¿Qué nos dice el Ecocardiograma?
El ecocardiograma nos permite “ver” el estado físico de nuestro corazón, si hay alguna anomalía a nivel de forma, tamaño, fuerza (ya que el corazón es un músculo), el funcionamiento de las válvulas, las presiones que soporta e incluso el grosor de las paredes del mismo.
Un cardiólogo puede ver el funcionamiento de nuestro “motor” y detectar por ejemplo, si existiera un derrame, un tamaño anormal de algún ventrículo, o una fuga en el cierre de una válvula (comúnmente conocida como soplo).
¿Cuál me conviene?
Obviamente son pruebas complementarias, lo que nos permite tener un conocimiento exacto del estado de nuestro corazón. Hay que remarcar que estas pruebas deben ser realizadas por un médico especializado en cardiología, que será quien estará mejor preparado para detectar cualquier anomalía o síntoma.
Si nos realizamos un diagnóstico completo (lo ideal), deberíamos empezar por un Ecocardiograma con Electro (en algunos casos se puede realizar a la vez) para conocer el estado eléctrico y físico de nuestro corazón y posteriormente una prueba de esfuerzo que arroje los datos precisos para poder adaptar nuestro entrenamiento y sacarle el máximo rendimiento.
Ninguna de estas prueba excluye a las demás, ya que cada una arroja diferentes datos sobre el estado de nuestro «motor», así que aprovechemos la visita al médico para realizarlas todas.
